El sector del transporte internacional se está viendo afectado por un gran aumento del precio de los fletes marítimos.
Esta y otras circunstancias amenazan a la viabilidad de muchas empresas, que comienzan a ver la importancia de mejorar su logística para minimizar el impacto.
Cómo amenaza a la logística internacional
Escasez de contenedores disponibles para llevar mercancías. Un fenómeno ya conocido en el ámbito logístico como la “crisis de los contenedores”.
El precio de los fletes de los contenedores se ha duplicado, pero existe el temor de que continúe subiendo, lo que para los consumidores finales puede significar retrasos en la entrega de productos, escasez y aumento de precios finales.
Gestión de la cadena logística
Un buen funcionamiento de la cadena de suministro resulta vital para el crecimiento y la mejora de cualquier empresa.
Optimizar la cadena de suministro es un paso fundamental que permite escalar la producción y expandir un negocio.
Tanto recursos como mercancía, información, operarios y departamentos están integrados y trabajando en sincronía, con lo que la operativa resulta mucho más fluida y los pedidos salen con mayor celeridad.
Entre las virtudes de una logística integral bien organizada se encuentran:
- Mayor agilidad. El flujo de trabajo responderá más rápido a las necesidades de los clientes.
- Aumento de la competitividad y de la capacidad de expandirse a nuevos mercados.
- Costes reducidos. Permite mejorar los procesos y reducir los gastos operativos.
- Mayor flexibilidad. Facilita la gestión de un mayor número de pedidos, así como la adaptación a un entorno de mayor incertidumbre.
- Gestión eficiente del stock, permitiendo disponer solo de los artículos necesarios en cada momento.
¿Cómo implementar una gestión integral de la logística?
Precisa de involucrar a todos los departamentos, y evaluar cada proceso.
Requiere analizar multitud de factores relativos al producto, a la gestión del transporte y la entrega, los movimientos en el almacén, la demanda, etc.
Se pueden trazar planes que permitan anticiparse e incluso sobreponerse a escenarios de crisis como el actual.
Sin embargo, implementar un sistema de logística integral puede ser un proceso costoso para una empresa en diferentes sentidos, pues no existe una solución común, sino un ajuste personalizado para cada organización.